«¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo. 17 Por lo cual, Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, Y no toquéis lo inmundo; Y yo os recibiré, 18 Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso.» (2 Corintios 6:16-18)
I. LA CLARIDAD DE LOS LÍMITES
A diferencia de un campo de fútbol o una cancha de baloncesto donde los límites están permanentemente pintados, los marcadores de línea en el campo de béisbol están hechos con tiza. Esto significa que, en el transcurso de un juego, las líneas, especialmente alrededor del plato, donde hay muchas idas y venidas, comienzan a volverse borrosas. A menudo, el árbitro se tomará un momento para limpiar el polvo del plato para que pueda verse claramente dónde deben estar los límites de la zona de strike. Y si las líneas sean borradas, puede pedir que se vuelva a marcar con tiza la caja del bateador para ver que sean claramente visibles las líneas donde se para el bateador.
II. LA IMPORTANCIA DE LOS LÍMITES
Los limites en la vida espiritual tienen un propósito. Esto es tan cierto en asuntos espirituales como lo es en los deportes. Dios nos ha dado pautas claras, tanto en mandamientos específicos como en principios específicos. Dios nos ha aclarado Su camino en Su Palabra. A veces llegamos a elecciones y decisiones difíciles que requieren que estudiemos cuidadosamente la Biblia para determinar qué principios se aplican. Pero en la mayoría de los casos, la confusión de los limites no proviene de la falta de la comprensión de lo que es correcto, sino de que realmente no queremos hacer lo que sabemos que es correcto y de buscar alternativas. Dios nos llama a vivir de tal manera que nos identifiquemos clara y distintamente con Él.
III. LOS BENEFICIOS DE LOS LÍMITES
Establecer límites espirituales nos protege de los estragos del pecado y nos permite experimentar la verdadera libertad en comunión con Dios. Estos límites, definidos por Su Palabra, nos ayudan a tomar decisiones con seguridad y propósito, fortaleciendo nuestra relación con Él y convirtiendo nuestra vida en un testimonio de obediencia e integridad, reflejando la imagen de Cristo ante el mundo.
Principio Familiar, Unidos Venceremos: Una relación cercana con Dios requiere que tracemos limites claros de distinción entre nosotros y el mundo.
Desafío familiar: Escribe y memoriza Tito 2:12
